Viendo la fotografía que ilustra esta entrada, no se me ocurría mejor título. La imagen habla y aunque es imposible saber que estaría pasando por la cabeza de Jorge Lorenzo en ese momento, le encajan como un guante, algunas frases de la canción de Alejandro Sanz, que lleva este mismo título.
“Existe un niño, que vive en mi, luchando por tenerte, y revive momentos, lejanos ya y me hace pensar” “ Confundiendo realidad, luchando por tenerte hasta el final” “ Que fuerza será, la que aún nos une”…. Unas frases que no irían dedicadas a ningún amor del pasado, si no a la sensación de ganar con autoridad y demostrando los quilates como piloto que tiene, sensación que el mallorquín reencontró ayer en Italia.
La segunda, pero primera victoria del año para el número uno, llego demostrando quién es el número uno, y que las cosas están empezando a cambiar, empezando a cambiar tomando como base lo que te había servido para conquistar el triunfo. En Italia, la moto de Lorenzo tenía mucho sabor a la Yamaha de 2010 y la cosa no podía terminar de otra manera que como había terminado el pasado curso con los mismos ingredientes: Buena moto + buen piloto = triunfo asegurado.
No fue un triunfo fácil, hubo que trabajar el desgaste de las Hondas, que al final se vieron inmersas en su propia pelea, para beneficio del campeón del mundo, que recortaba la distancia con Stoner.
La salida, como en casi todas las carreras anteriores, fue un calco. Stoner, sale y se pone a liderar y tras él, su compañero de equipo, y los dos pilotos de Yamaha, y el simpático Simoncelli. Con este panorama, la cosa invitaba a apagar la tele y esperar que el australiano cumpliese con su dominio y volviese a recuperar la senda del triunfo. Pero no se sabe si fue por el aviso que le dio Ben Spies en Assen, demostrándole que se le puede ganar o por los vaticinios de Ernest Riveras que hablaban de triplete español, que en el ambiente flotaban las buenas vibraciones para el motociclismo nacional.
Ni la distancia que tomaba el aussie en cabeza, hizo desistir de su pelea por la victoria al bravo espartano. Primero se deshizo del freno que estaba suponiendo Andrea Doviozoso y después marchó a tumba abierta a batir al enemigo más fuerte a reconquistar a la chica más guapa del circuito que se llama Victoria y que llevaba demasiados días lejos de sus manos.
Encontró el hueco justo, la única rendija para la luz que le guiaba hacía el triunfo y no desaprovecho la oportunidad. Con el número uno liderando la carrera se pudo observar como las ordenes de equipo no existen en Honda, y Dovizioso pensó primero en él mismo, en sus méritos, en su gran temporada y en ser el único italiano que pisará podio en la madre patria, antes de pensar en que sería mejor para la lucha por el cetro mundial, acabar tercero y dejar que la perdida de puntos entre su compi Stoner y el estilete de Yamaha fuera menor.
Con el podio compuesto, quedaba la lucha por la medalla de chocolate, que fue para Ben Spies, en un vibrante mano a mano, con “La culpa es de todos menos mía Simoncelli”, que acabo una carrera sin tirar a nadie, ni caerse él, consiguiendo el mejor resultado del año, cuando centro sus esfuerzos en correr con cabeza.
De cabeza, le trae a Rossi su Ducatti, no termina de arrancar, no termina de estar a la altura de lo esperado; no sabemos si la moto o el piloto, pero parece quedar claro que o Valentino a perdido el tino para evolucionar motos y hacerlas campeonas, o que la Ducatti es como un canguro que sólo se domestica si le hablas con acento y pilotaje australiano.
Aunque esto ultimo se desmitifica un poco si atendemos a los resultados de las otras Ducatis de la parilla, que este fin de semana estuvieron rallando también con buena nota, incluso las no oficiales, como la de Héctor Barbera, que realizó el segundo mejor resultado de la temporada y que ojalá que aproveche este buen test para mejorar sus logros en lo que queda de campeonato.
Para olvidar también el fin de semana para Alvaro Bautista, que salía muy atrás en este cita y que aprovecho su buena salida y el ritmo de las primeras curvas para posicionarse sexto, cuando ese afán por situarse en la cabeza le dio un susto que lo llevaría hacía las posiciones de cola, que ya no podría abandonar, mermado por los problemas de sus neumáticos. Mezcla de sabores, pues para el talaverano, que mientras todo funciono OK, estuvo de 10, siendo el primero de los mortales, de los que corren a otra cosa y que tuvo que replegarse para evitar males mayores, cuando lo que no esta bajo su control le fallo.
El que no encuentra su feeling, con la moto es Toni Elias, que una vez más ha quedado muy lejos de la lucha, de esa batalla que se produce desde el sexto puesto y que podría estar agotando la paciencia de la gente de su equipo, esperemos que le mantengan el crédito, aunque en los negocios, y esto lo es, no se entiende de sentimientos.
Termino hablando de Pedrosa, de su regreso, de sus buenas sensaciones, pese a no encontrase al cien por cien. Buen resultado en la pista siendo octavo, buenas declaraciones tras la carrera, alabando el trabajo de un piloto nacional, hasta hace poco enemigo irreconciable, ante un piloto de tu misma marca. Regresa Pedrosa, que desafortunadamente no luchará por el mundial, pero que dará muchas alegrías y al que para cerrar como empezamos también le digo. Dani, en nombre de los que amamos este deporte:" Como te he echado de menos".
"marchó a tumba abierta a batir al enemigo más fuerte a reconquistar a la chica más guapa del circuito que se llama Victoria y que llevaba demasiados días lejos de sus manos" ohhh me ha encantado esta frase!! eres una artista!!
ResponderEliminarFantástica crónica de lo acontecido ayer en Mugello,desde que tengo uso de razón solamente en dos ocasiones he pasado los peores nervios de mi vida viendo las carreras,la primera la semana pasada con el triunfo de mi querido texano y esta sabiendo que en cuanto Jorge pudiera adelantar a Dovi se acercaría a Stoner,confío en nuestro piloto pero sinceramente,jamás pensé que lograría la victoria...
ResponderEliminarMi vista cual ojo del casco de Rossi se debatía entre el circuito y el panel de la pantalla para ver si Mi Cari adelantaba a Simoncelli.
Volvió nuestro espartano más guerrero que nunca...